lunes, 19 de mayo de 2008

PINBALL DE CALLE


















Delante de este muelle pondremos a los embusteros, a los trepas, a los indeseables, a los egoístas, a las malas personas, y los lanzaremos lejos, muy lejos , muy fuerte y muy deprisa, hacia órbitas lejanas de galaxias remotas amenazadas por agujeros negros, que oculten su capacidad de crear sombra en las vidas ajenas.


Pero, la pregunta es ¿quedará alguien?.

Quizás quien dispare el resorte, aunque lo más probable es que sea automático. Está claro, ni ése.


PD: pensándolo bien, en cuanto se lanzase a dos, alguien estaría dispuesto a pagar por ser lanzado. El resorte acabaría, y valga la redundancia en un resort.

1 comentario:

Azpeitia poeta y escritor dijo...

Hay gente que antes de empezar la vida, ya le dejan sin muelle, sin resorte...sin nada....azpeitia