sábado, 19 de agosto de 2017

INDIGESTIÓN

"Pide la cuenta que es la hora  de comer" "Está pagado" "Ya te has adelantado. Pues aquí no se va nadie. Juan, otra ronda de lo mismo" "¿Qué ha sido?" "Seis tercios una de patatas con aceitunas y uno de pulpo" "Marchando" "Me tengo que marchar, Además es la tercera" "Te esperas"

Apuro la cerveza. Se despidióy subió a comer a casa de sus padres. Eran  casi las tres, su padre estaba sacando los platos de aperitivo. A su derecha salíó una jarra de cerveza. "Creo que ya he bebido mucho" "No tienes que conducir" Jamón, gamba roja, ensaladilla de marisco. Delicioso. Venía sin hambre pero poco a poco da cuenta de todo. Suena el timbre. Su tía. Se suma al aperitivo y trae una sartén de migas. "Vamos a por ellas que se enfría" A su izquierda viene una copa de vino. Deja la jarra vacía , a su derecha un tenedor. Las migas están deliciosas. No puede más. "Veis como ha caido todo. Decíais que era mucho. Hacedle un hueco a la paella" Se sientan. Su padre enfrente suyo  le vuelve a llenar el vaso de cerveza. No se resiste. Ya casi no puede resistirse.  Le pasan su plato de paella. NO tiene hambre pero está tan rica. "Échale un poco más al zagal que se ha quedado espirituao" "Toma" Su padre le ecao dos andanadas de paella con la rasera, le rellena el vaso, esta vez con sangría. el segundo plato cae. Va a reventar. "Y de postre tarta de tres chocolates" "Tu tía había hecho tarta de la abuela" "Que se la baje y echamos un trocico de cada en cada plato" "Mamá ahora sí. NO puedo más." "¿Le vas a despreciar un trocico de tarta a tu mamá?" "¿O a tu tía?" La respuesta es no. Por fin no hay más que comer. Aparecen los chupitos y el café. Sobre la mesa todavía cae algún polvorón y algún ferrero de navidad. Su madre pregunta si alguien quiere helado que lo había olvidado. Se levanta retrepándose en la mesa. Sale del comedor apoyándose en las paredes. Se despide. "No aguanta na" Todos ríen el chiste de su tío. Nunca se había encontrado así. siente toda la sangre en la tripa haciendo una digestión eterna, sus músculos se debilitan, los párpados se le caen. A duras penas llega a la cama. Casi no puede respirar. Suda. Boca arriba se duerme.

Alguien entra en la habitación. El techo es blanco. Sólo alcanza a ver un trozo de moldura. Su madre le habla. Se le acerca mucho a la cara. Siente la salivilla sobre su piel. No la oye. La ve pero no la oye. Lo zarandea. Grita. Llora. Desesperada. Desaparece de su vista. Llega su padre y su hermano. Su tía le hace compresiones en el pecho que le hacen  cambiar la perspectiva de la visión. Tita no.No me aprietes más que estoy muy hinchado. Déjame dormir. Su padre se acerca y le besa. Sopla. Está soplando. Eso me faltaba, que encima de lo hinchado que estoy me soplen a ver si termino de reventar. Un crujido. su tía siempre ha sido muy bruta. Todos se han vuelto locos. Llegan tres persona vestidas con camisetas amarillo fosforescente que desplazan al resto. Le rompen su camista favorita de los Lakers de Magic. Frío en el pecho donde mismo sintió el crujido. Una corriene eléctica que le pone rígida la columna. Le sacude la cabeza, tanto que ve incluso el poster de Pamela Anderson de la cabecera de la cama. Todos se han vuelto locos. Creen que estoy enfermo. Solo estoy muy hinchado. Dejenme dormir y estaré bien. Otro chispazo. Le están destrozando la mano para buscarle una vía. Un rato después, por fin, se le ha hecho eterno, la que debe ser la médico se levanta y hace un gesto al resto criuzando las manos de que es suficiente. Desde luego es suficiente. Vaya un despertar de la siesta de un domingo. Con lo mal que me acosté, consigo dormirme y llega hasta el séptimo de caballería con caballos y todo a patearme el pecho. De nuevo mi madre y mi tía. Lloran. Me abrazan y me besan. Mi padre también llora. Una mano me cubre la cabeza con la sábana. Por fin. Tranquilo de nuevo. Veinte minutos después me desnudan. ¡Qué haceis rompiendo mi traje! Ese traje me costó una pasta par la boda del hermano. Lo cortáis por detrás. Me visten. Me meten en volandas en una caja y a partir de ahí oscuridad. Un coche. Cada frenazo me golpeo con la tapa  posterior de donde me tienen retenido. Conduzca con más cuidado quienquiera que sea. Se detiene. Otro golpe. Me desplazan sobre algo con ruedas. No está amortiguado. Cada resalto lo noto en la espalda. De nuevo la luz. Que hace ese señor con una brocha. Me maquilla. Oiga. Quien se ha creído que soy. No es carnaval.  Hace fresco. Me acomoda el traje y la corbata. Me vuelven a tapar. De nuevo la luz. Tenue. Enfrente una vitrina donde puedo ver a mi primo Luis que es muy alto . Del resto solo elcogote. Me duele la barriga. Siento movimientos. Eructo. Eructo de nuevo. Expulso gases como yo quería y encuentro una mejoría inmediata. Me levanto. El traje que estaba roto por detrás se me cae y me quedo maquillado en calcetines y calzoncillos. Me acerco a la vitrina. Aquí dentro hace demasiado frío para estar desnudo. Me alegro de verlos a todos juntos, los saludo y sonrío. Algunos corren, mi tía y mi madre se desmayan. El funerario entra por detrás. y trata de obligarme a que me meta de nuevo en la caja. Me resisto y le explico que no,que no es un error, que el error es el suyo. Estoy vivo. sólo un empacho. Es la hora de merendar.

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